Cuando el cabello ha perdido su fuerza, brillo, si tiene cierta tendencia grasa, seca, sufre de caspa, o si hay presencia de zonas en las que claramente falta densidad o encontramos claros, es el momento de consultar a un especialista y pedir un análisis capilar.
Un análisis capilar es el procedimiento con el que daremos todas las respuestas al paciente. Para ello buscaremos síntomas, indagaremos en las causas y en posibles enfermedades, observaremos de forma directa y aplicaremos la mejor tecnología para aportar soluciones a sus necesidades.
Sólo una vez encontradas las causas del problema capilar podemos decidir y proponer el mejor tratamiento o tratamientos para frenar la caída, aportar hidratación, fortalecer un cabello desvitalizado y potenciar el crecimiento.
Nuestro médico especialista pautará el mejor protocolo de tratamientos médicos y estéticos así como recomendará los productos de uso domiciliario necesarios para potenciar el resultado.
Los tratamientos estéticos, que son no invasivos, se suele aconsejar para revitalizar un cabello o cuero cabelludo que sufre alguna alteración leve como sequedad, grasa, caspa o caída leve. Mediante los productos dermocosméticos adecuados y la estimulación del riego sanguíneo que provoca la diatermia o el masaje subdérmico, logramos revertir el problema y obtener un cuero cabelludo sano y un cabello vigoroso. Sin embargo, cuando el problema capilar necesita de algo más que una estimulación externa, el profesional médico pautará tratamientos médicos, que son invasivos, con el objetivo de introducir nutrientes, factores de crecimiento o fármacos, normalmente estos tratamientos médicos se pautan para frenar la caída capilar.